Año tras año, el clima más frío trae un aumento en los casos de resfriados y gripe. Para mantenerte lo más saludable posible en esta época del año, es importante tomar medidas para fortalecer tu sistema inmunológico.

Aunque no existe una cura mágica para evitar enfermedades y virus, hay algunos hábitos que puedes adoptar para mantenerte sano durante los meses de alta transmisión. Aquí hay algunas formas de apoyar mejor tu sistema de defensa natural: desde dormir lo suficiente, mantenerte hidratado y, por supuesto, disfrutar de las propiedades curativas de una kombucha natural.

Inmunidad IOI

Para entender primero las formas en que podemos evitar resfriados y gripes, es importante comprender qué es la inmunidad para poder reforzarla. Hay muchos tipos de inmunidad, pero, en resumen, la inmunidad se refiere a la capacidad del cuerpo para protegerse de los microorganismos causantes de enfermedades.

Nuestras respuestas inmunológicas funcionan reconociendo partículas extrañas (como virus y bacterias) que ingresan al cuerpo, y creando anticuerpos que atacan esas partículas extrañas. Por lo tanto, si el cuerpo tiene un sistema inmunológico fuerte, podrá combatir mejor cualquier enfermedad o infección potencial. Hay varias formas en que puedes aumentar tu inmunidad este invierno y durante todo el año...

Cómo Aumentar Tu Inmunidad

Bebe Probióticos

Aumentar tu inmunidad este invierno no tiene por qué ser difícil ni costoso si sabes qué pasos tomar. Beber kombucha es una forma de mejorar tu sistema inmunológico sin gastar mucho dinero ni cambiar tu estilo de vida. El proceso de fermentación de la kombucha utiliza bacterias y levaduras para crear probióticos que brindan muchos beneficios para la salud, como una mejor digestión, reducción de la inflamación, salud intestinal, niveles de energía aumentados y más.

Además, los antioxidantes que se encuentran en la kombucha han demostrado ser antiinflamatorios, lo que puede llevar a una mejora en la salud con el tiempo. Más allá de sus muchos beneficios, SAN BLAS Kombucha está hecha con materias primas de la más alta calidad para obtener la mayor cantidad de probióticos posible. Además, sus ingredientes potentes tienen sus propios beneficios para aumentar la inmunidad, como el jengibre, el limón, la espirulina, los frutos rojos y otros.

Toma suplementos

Los suplementos también pueden ser una gran adición a tu dieta actual. En un mundo perfecto, todos estaríamos comiendo alimentos enteros, vivos y fermentados que sean vibrantes en color y ricos en nutrientes todos los días. Sin embargo, hay momentos en los que nuestros cuerpos pueden necesitar un impulso adicional y, en esos casos, las vitaminas son una forma de ayudar a fortalecer tu inmunidad.

De las mejores vitaminas para fortalecer tu sistema de defensa, la Vitamina C es bien conocida por sus propiedades para aumentar la inmunidad. Otras vitaminas como la Vitamina D y el zinc también son efectivas para fortalecer el sistema inmunológico.

Mantente Hidratado

Mantenerse hidratado es clave para mantenerse saludable. La hidratación ayuda a prevenir enfermedades al asegurarse de que el cuerpo funcione como debe. Cuando el cuerpo está deshidratado, hay una escasez de recursos que suprime la función inmunológica, dejándote susceptible a infecciones. Si te despiertas sintiéndote mal o percibes un aumento de enfermos en tu entorno, aumentar tu hidratación puede fortalecer la capacidad de tu cuerpo para combatir patógenos.

Una vez enfermo, síntomas como la fiebre también pueden deshidratar el cuerpo. En ese caso, reponer los líquidos del cuerpo se convierte en la prioridad para la recuperación. Para una hidratación superior, el Agua de Kéfir tiene electrolitos y probióticos de origen natural para que puedas mantenerte hidratado y tu inmunidad permanezca fuerte.

Descansa lo suficiente

La investigación ha demostrado que no dormir lo suficiente, o no tener un sueño de calidad, tiene efectos negativos en la capacidad de tu cuerpo para combatir infecciones. El sueño constante es necesario para producir citoquinas (proteínas liberadas por el sistema inmunológico durante el sueño) que promueven más sueño. Los anticuerpos y las células que combaten las infecciones también se reducen durante los períodos en los que no duermes lo suficiente. Refuerza tu salud durmiendo al menos siete a ocho horas de sueño ininterrumpido cada noche.

Mantente Activo

Se sabe que mantenerse físicamente activo tiene un efecto positivo en la inmunidad. Vemos esto porque el ejercicio estimula a las células inmunológicas a patrullar el cuerpo en busca de infecciones. Una vez identificadas, estas células pueden ser eliminadas. Solo unas pocas horas de ejercicio moderado a lo largo de una semana pueden aumentar la circulación de las células inmunológicas.

 La intensidad del ejercicio no es tan relevante. Caminar, trotar y encontrar otras formas de mantenerse activo es suficiente para desarrollar una inmunidad activa. Y si buscas aumentar tus niveles de energía para mantenerte activo, la kombucha tiene contenido natural de cafeína.

La inmunidad comienza desde dentro

Por supuesto, hay pasos de sentido común para mantener el resfriado común o la gripe a raya, como lavarse las manos y construir hábitos saludables y transformadores, pero la verdadera inmunidad comienza desde dentro. La inmunidad depende de la salud integral que incluye dormir lo suficiente, reducir el estrés, mantenerse activo y alimentar tu cuerpo con una dieta saludable llena de muchas frutas y verduras.

La próxima vez que sientas que un resfriado se acerca, o te preocupes por contraer uno, toma medidas para ayudar a fortalecer y construir un sistema inmunológico saludable.